No hace mucho, una persona cambió mi día con una sola palabra.
Tenía la necesidad de postearlo porque me parece importante tenerlo siempre presente. Cómo con una sola articulación de tu voz el sentido de la vida misma puede cambiar, aquí es cuando entiendo el poder de las palabras que quizás sea equiparable al poder del silencio, todo depende de las circunstancias.
Para algunos la palabra puede ser la más compleja del mudo, la más desconocida o bien la más común, para mi esa palabra significó fuerza, y lo mejor de esta anécdota es que esa personita no tenía idea de lo que me estaba diciendo.
Lo sé, he querido mantener la intriga hasta el final, aún estoy escribiendo y decidiéndo al mismo tiempo si en éste escrito debería de poner la palabra de la que hablo, o bien quizás si la pongo el fuerza de la idea que intento transmitir se perdería.
Lo he decidido, la palabra fue COLEGA.
5 comentarios:
Hola Angie, me encanta el nombre de tu blog y me encanta este post. Hace unos años entreviste a un periodista que en aquel momento me parecia lo maximo y acababa de publicar un libro; yo tenia poco tiempo de haber empezado en el periodismo. Terminando la entrevista le pedi que me firmara mi ejemplar de su libro, y el tipo me puso: "Para mi COLEGA Eileen, tal y tal y tal...". Pasaron varios dias y yo seguia viendo la dedicatoria; entiendo bien lo que dices.
Solo para el registro, años despues me di cuenta de que el tipo ni era tan "aca", y que diciendome colega lo que hizo fue autopiropearse... algun dia te pasara igual.
Gracias por tu visita a mi blog, te seguire leyendo.
Pues supongo que todas las palabras tienen un sentido especial dependiendo del momento y de la persona que las dice, tal vez como dice el otro post a veces es bueno sentirse reconocido, escuchaba que no somos capaces de reconocer los logros de los demás, y que eso es importante, también podría significar pertenencia, o compañía, está padre, bueno ya es todo, ya me voy, acá seguimos.
Qué buena anécdota, creo que siempre vamos buscando esa palabra o momento que nos haga sentir únicos. Yo sigo en la búsqueda. ¡Saludos!
¿Y si entre nosotros, blogueros (algunos nuevos otros más expertos), nos decimos colegas?
¿Ya se dieron cuenta de que también lo somos?
Y quizá no sabemos más de nuestras historias que lo que alcanzamos a entender, de lo que alcanzamos a expresar, de lo que alcanzamos a percatarnos, de lo que alcanzamos a vivir...
En fin...
Seguimos viéndonos-leyéndonos
hola colega!!!
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